DE PROFUNDIS. Música para María Teresa de Austria
FIAS 2021
Basílica Pontificia de San Miguel (Madrid)
19 de marzo de 2021
Marc - Antoine Charpentier (1643-1704)
Pour un reposoir, H. 508
I. Ouverture / II. Tantum ergo / III. Tantum ergo (Gregorian) / IV. Fugue / V. Genitori (Gregorian) / VI. Amen / VII. Allemande grave
De profundis, H. 189
I. Prelude / II. De profundis clamavi / III. Fiantaurestuae / IV. Quia apud te / V. A custodia matutina / VI. Et ipseredimet / VII. Requiem aeternam
Sonate à huit, H. 548
I. Grave / II. Récit de la viole seule - Sarabande / III. Récit de la basse de violon - Bourrée / IV. Gavotte / V. Gigue / VI. Passecaille / VII. Chaconne
Magnificat à 3 voix sur une basse obligée H. 73
SONATA K 513 PASTORALE D. SCARLATTI
MÚSICA Y TEATRO DE SOMBRAS
Domenico Scarlatti, antiguos mitos y sombras
Las “academias y funciones” representadas en los Reales Sitios, como la Casita de Arriba de San Lorenzo de El Escorial, en las que se incluían bailes y espectáculos diversos como el teatro de sombras amenizado con música, son un ejemplo del nuevo gusto por lo diferente y exótico.
CHACONAS, FOLÍAS Y OTRAS LOCURAS
(La danza que bailó Don Quijote y su influencia en la música europea del siglo XVII)
Estrenado el 15/08/2015 en la XXVIII Edición Clásicos en verano 2015 Música de cámara en entornos históricos.
"[...] fue esta danza la que bailó Don Quijote en Barcelona, en casa de don Antonio Moreno.” C. Roda
La folía fue un baile destacado en los ambientes populares de la Castilla de finales del siglo XVI. Los tratadistas de la época lejos de menospreciarlo, por su carácter y origen popular, trataron de definirlo fielmente. De este modo, Covarrubias en su Diccionario Tesoro de la lengua castellana, publicado en 1611, habla de la folía señalando que:
“Es una çierta dança portuguesa, de mucho ruido porque ultra de ir muchas figuras a pie con sonajas y otros instrumentos”
SACRI PROFANIS
SACRI PROFANIS © 2019
Presentamos nuestro nuevo trabajo discográfico dedicado a una de las más bellas y geniales páginas de polifonía escritas por Domenico Scarlatti junto a dos maravillosas cantatas de cámara escritas por su padre, el genio napolitano Alessandro.